Jornada de reflexión a punto de llegar al ecuador de las pruebas orales. De la justa reclamación del reconocimiento de horas de formación y de las competencias básicas que adquiere el vocal de oposiciones…
La autoridad supuestamente competente que diseña y dirige los procesos de acceso a la función docente (las oposiciones, vamos) debería recapacitar sobre la manera de hacer más atractiva para el profesorado la participación en los tribunales de selección, dado que todo el mundo sabe que, salvo raras excepciones que ellos sabrán a qué se deben, el común de los mortales intenta por todos los medios eludir, por lo civil o lo criminal, esta carga que te toca tras un sorteo cuyas reglas y mecanismo no entiende ni Dios.
Una sugerencia que hago, como funcionario aplicado que se ha leído el Estatuto Básico del Empleado Público (Ley siete, barra, dos mil siete, de doce de abril), especialmente el apartado 10 del artículo 54 que señala que los empleados públicos pondrán en conocimiento de sus superiores o de los órganos competentes las propuestas que consideren adecuadas para mejorar el desarrollo de las funciones de la unidad en la que estén destinados (vale, pongo una coma para que respires), es que las horas de asistencia a tribunales de oposición computen como horas de “formación”.
Nadie puede negar que todos los vocales estamos recibiendo un cursillo intensivo y condensado sobre: legislación educativa, apartados de una programación didáctica, diseño de unidades didácticas, elaboración de actividades, bibliografía y sitios web de interés educativo…., etc., etc.
Pero, sobre todo, deberían tener en cuenta lo mucho que estamos aprendiendo sobre competencias básicas, y además de un modo absolutamente significativo y constructivista, como le gusta a la autoridad competente, aunque sea la que menos aplica estos principios a su práctica.
A modo de breve resumen, veamos todo lo que ha aprendido este vocal de oposición en los últimos cuatro días ( y lo que le queda por aprender en los seis que vendrán).
1. Competencia en comunicación lingüística.
Esta competencia se refiere a la utilización del lenguaje como instrumento de comunicación oral y escrita, de representación, interpretación y comprensión de la realidad, de construcción y comunicación del conocimiento y de organización y autorregulación del pensamiento, las emociones y la conducta.
Esta competencia la he trabajado básicamente usando el leguaje oral y escrito en infinidad de quejas que estoy comunicando (para nada) desde que empezaron las pruebas orales, autorregulando mi pensamiento y emociones para no proferir exabruptos y blasfemias. También he aprendido que desahogarte con el lenguaje ayuda a regular la conducta para no incurrir en comportamientos que podrían constituir delito, como por ejemplo el incendio intencionado. Por mi cuenta he añadido un poco de competencia en comunicación gestual, porque aunque no podéis verlo ahora mismo le estoy haciendo un soberano corte de mangas a quien corresponde…
2. Competencia matemática.
Consiste en la habilidad para utilizar y relacionar los números, sus operaciones básicas, los símbolos y las formas de expresión y razonamiento matemático, tanto para producir e interpretar distintos tipos de información, como para ampliar el conocimiento sobre aspectos cuantitativos y espaciales de la realidad, y para resolver problemas relacionados con la vida cotidiana y con el mundo laboral.
Esta competencia la he trabajado echando cuentas y más cuentas para ampliar mi conocimiento sobre aspectos cuantitativos de la realidad y ser consciente de problemas relacionados con mi vida cotidiana y laboral. Lo de resolverlos, desgraciadamente, no está en mis manos. Algunas operaciones básicas han bastado para tomar conciencia del tiempo que le estoy robando a mi hija, de las jornadas laborales abusivas y alegales (no es errata) que me están obligando a hacer y de la mierda que vale mi trabajo, a juzgar por lo que resulta de dividir entre las horas de cada jornada de asistencia a tribunal lo que la Conejería paga por día.
3. Competencia en el conocimiento y la interacción con el medio físico.
Es la habilidad para interactuar con el mundo físico, tanto en sus aspectos naturales como en los generados por la acción humana, de tal modo que se posibilita la comprensión de sucesos, la predicción de consecuencias y la actividad dirigida a la mejora y preservación de las condiciones de vida propia, de las demás personas y del resto de los seres vivos.
Anda que no he interactuado con el medio físico. Y lo que llevo aprendido de modo significativo, signifique lo que signifique. Podría calcular la amplitud térmica en Granada, deducir la temperatura del asfalto cuando el aire marca 40º, predecir que mañana lo voy a pasar muy mal cuando la ola de calor alcance sus cotas máximas, … Lo que todavía no sé es que me aporta eso para la mejora y preservación de las condiciones de mi vida propia, de los opositores y del resto de los seres vivos, incluido el presidente de mi tribunal.
4. Tratamiento de la información y competencia digital.
Esta competencia consiste en disponer de habilidades para buscar, obtener, procesar y comunicar información, y para transformarla en conocimiento. Incorpora diferentes habilidades, que van desde el acceso a la información hasta su transmisión en distintos soportes una vez tratada, incluyendo la utilización de las tecnologías de la información y la comunicación como elemento esencial para informarse, aprender y comunicarse.
Si estás leyendo esto huelga que te cuente cómo he trabajado la transmisión de información utilizando las TIC. También he ejercitado la búsqueda de información en internet: sobre jornadas laborales, derecho a percepción de dietas, direcciones web de sindicatos… Total, que gracias a las TIC me he informado, he aprendido y me he comunicado. Paná…….
5. Competencia social y ciudadana.
Esta competencia hace posible comprender la realidad social en que se vive, cooperar, convivir y ejercer la ciudadanía democrática en una sociedad plural, así como comprometerse a contribuir a su mejora. En ella están integrados conocimientos diversos y habilidades complejas que permiten participar, tomar decisiones, elegir cómo comportarse en determinadas situaciones y responsabilizarse de las elecciones y decisiones adoptadas.
Sin duda, los últimos días me están sirviendo para conocer mejor la realidad social en la que vivo (una auténtica pena), para convivir con personas que se morirían por estar donde yo estoy, pese a lo que me quejo, y para ejercer la ciudadanía democrática denunciando situaciones injustas. Ahora bien, lo de elegir cómo comportarme me está costando más, porque ya he estado tentado varias veces de hacer una locura y mandar todo esto a la mierda y al final no lo he hecho. En este aspecto tengo que mejorar mucho, pero no dudo de que conforme vayan pasando los días lo conseguiré (mandarlo todo a la mierda y hacer una locura).
6. Competencia cultural y artística.
Esta competencia supone conocer, comprender, apreciar y valorar críticamente diferentes manifestaciones culturales y artísticas, utilizarlas como fuente de enriquecimiento y disfrute y considerarlas como parte del patrimonio de los pueblos.
Aunque tal vez sea la competencia que menos he trabajado en estos días, debo reconocer que el hecho de que la sede de mi tribunal esté en un edificio histórico de comienzos del siglo XX suponía un buen recurso para su desarrollo. Lo malo es que ya me conozco de memoria este edificio, porque el horario compartido diurno/nocturno que me perpetraron los dos jefes de estudios del curso 95-96, en que para mi desgracia ejercí como profesor en expectativa de destino, con sus ventitantas horas de huecos me dio tiempo a desarrollar plenamente mi conocimiento de esa maravilla arquitectónica que es el IES Padre Suárez, Cárcel Padre Sudores para los damnificados en él.
7. Competencia para aprender a aprender.
Aprender a aprender supone disponer de habilidades para iniciarse en el aprendizaje y ser capaz de continuar aprendiendo de manera cada vez más eficaz y autónoma de acuerdo a los propios objetivos y necesidades.
Esta experiencia me está sirviendo mucho para ser capaz de continuar aprendiendo de manera eficaz y autónoma sobre la iniquidad, la impericia, la falta de escrúpulos y de cerebro de ______________ (Actividad de espacios en blanco para refuerzo).
8. Autonomía e iniciativa personal.
Esta competencia se refiere, por una parte, a la adquisición de la conciencia y aplicación de un conjunto de valores y actitudes personales interrelacionadas, como la responsabilidad, la perseverancia, el conocimiento de sí mismo y la autoestima, la creatividad, la autocrítica, el control emocional, la capacidad de elegir, de calcular riesgos y de afrontar los problemas, así como la capacidad de demorar la necesidad de satisfacción inmediata, de aprender de los errores y de asumir riesgos.
Esta competencia, sintiéndolo mucho, me niego a trabajarla sobre mí mismo. Porque si la persona que me incita a ser responsable, perseverante y autocrítico (no te jode), que me pide que controle mis emociones, calcule riesgos antes de actuar y demore mi necesidad de satisfacer inmediatamente mis derechos (por ejemplo), es la misma que me obliga a trabajar en las condiciones penosas y alegales que vengo denunciando… que se aplique esta competencia a sí misma para dar ejemplo.
Nota 1: Aunque no soy un experto en competencias básicas, tengo entendido que las recomendaciones de la UE que tanto se han alegado en este tema incluían una novena competencia que, por arte de magia, ni el gobierno español ni las Comunidades Autónomas han incluido en ninguna de sus regulaciones. Podríamos llamarla “la competencia perdida en España”, y versaba sobre el fomento de la cultura emprendedora. Hay quien alega que se obvió esta competencia no fuera a ser que se desarrollara de manera tan efectiva que la ciudadanía terminara emprendiéndola a gorrazos con las administraciones educativas.
Nota 2 aclaratoria y fuera de contexto: En un foro de opositores un candidato preguntaba si alguien sabía qué escriben los vocales en sus libretas. No sé los demás, pero yo muchas veces tomo apuntes para tratar de mejorar mis clases, o alguna referencia de internet que no conocía. A veces, no lo niego, sólo hago el gesto de escribir para que una persona alicaída sepa que alguien le escucha con atención, y que lo que dice, mejor o peor, me importa.